El Hospital Clínico Universitario de Valladolid tiene implantada la guía clínica de buenas prácticas “Prevención de caídas y disminución de las lesiones derivadas de las caídas”, documento que recoge recomendaciones para profesionales sanitarios, usuarios y sus familiares, con las que se pretende reducir el riesgo de estas caídas hospitalarias y los daños que de ellas puedan provenir, según informaron hoy fuentes del centro en un comunicado.

La implementación de este recurso asistencial forma parte del Programa Best Practice Spotlight Organization (BPSO®) de Centros Comprometidos con la Excelencia en Cuidados (CCEC®), conjunto de iniciativas lideradas por enfermeras que el Clínico puso en marcha en 2019 y que, en España, cuenta con la financiación del Instituto de Salud ‘Carlos III’ y, más concretamente, coordinado por su Unidad de Investigación en Cuidados (Investen-ISCIII).

Precisamente, el resultado de la implantación de esta guía y sus recomendaciones en el hospital vallisoletano ha sido recientemente protagonista del XXVIII Encuentro Internacional de Investigación en Cuidados (Investen), celebrado en Castellón de la Plana y durante el que la intervención de los representantes del Clínico ha merecido el premio a la ‘Mejor comunicación oral con mayor impacto clínico’.

Desde 2020 y hasta el presente 2024, la incidencia de caídas en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid ha pasado del 1,3 por ciento al 1,05 por ciento, lo que la sitúa por debajo de la media europea, ese 2,4 por ciento anteriormente citado. Por su parte, la tasa de caídas por cada 1.000 días de ingreso ha ido descendiendo desde el dos por ciento en 2020 a 0,54 por ciento en el primer trimestre del año en curso.

Asimismo, el tiempo medio hasta la caída es cada vez más amplio, prolongándose hasta situarse por encima de la estancia media de ingreso en el centro vallisoletano, y la frecuencia de los pacientes ilesos tras caerse es mayor que los que finalmente presentaron lesiones.

Los datos referidos a esta circunstancia indican que, a nivel mundial, alrededor de un dos por ciento de las personas ingresadas sufren una caída durante su estancia hospitalaria; en Europa, la incidencia media es de 2,4 por ciento en grandes hospitales, mientras que en España este porcentaje en 2021, en adultos mayores de 65 años, fue de 1,61 por ciento por cada 1.000 días de estancia.