VALLADOLID - SANIDAD
Jueves, 6 de Marzo de 2025

Consejo- La Junta asegura que Tamames asume con su renuncia el “error grave” de sus declaraciones sobre la pandemia y pide disculpas

ICAL - Álvaro Muñoz Galindo, hasta ahora director general de Calidad e Infraestructuras Sanitarias, asumirá las competencias de la ya exdirectora general de Salud Pública

El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, calificó hoy como “un grave error” las declaraciones realizadas ayer miércoles por la directora general de Salud Pública, Sonia Tamames, que defendió que “la pandemia por Covid-19 no fue una pandemia de gran gravedad”, en una entrevista en el programa ‘Cuestión de prioridades’, de Castilla y León Televisión.

Para Fernández Carriedo, Tamames asume con su renuncia “a petición propia” el grave error cometido. “Desde la Junta, seguimos insistiendo en nuestro compromiso y reconocimiento de la gravedad de la pandemia, con las vidas perdidas, el dolor causado, y los daños a todo el tejido social y económico de Castilla y León. Lamentamos esa entrevista y esas declaraciones, y pedimos disculpas a cuantos se hayan visto afectados por ellas, al tener que rememorar aquellos momentos”, subrayó en declaraciones recogidas por Ical.

Para el portavoz, la dimisión de la directora general “refleja el nivel de exigencia de la Junta en todas sus actividades, y su compromiso con el conjunto de la ciudadanía”. Según adelantó, las funciones que ella desempeñaba desde comienzos de 2022 pasan ahora a ser ejercidas por el director general de Calidad e Infraestructuras Sanitarias, Álvaro Muñoz Galindo.

Fernández Carriedo, que apuntó que no ha tenido ocasión de hablar personalmente con ella, aseguró que el Ejecutivo agradece a Tamames “su trabajo todos estos años” y su “vocación de servicio público”, que calificó como “muy positivo durante el conjunto de su actividad”. Según apuntó, la exdirectora general de Salud Pública “es consciente de la gravedad que supuso la pandemia en términos de impacto humano, para las familias y personas, del coste de vidas humanas y el destrozo que supuso para muchas familias de la Comunidad, y del impacto social y económico que tuvo”.

“Ella es consciente de que cometió un error al expresarse en esos términos, asume el error y presenta su renuncia. Eso refleja cuál es el nivel de exigencia que tiene la Junta como administración pública al servicio del conjunto de los ciudadanos”, insistió.