Jueves, 10 de Abril de 2025
GSK reúne a una docena de organizaciones de pacientes en su planta de Aranda de Duero (Burgos) para promover el intercambio de experiencias
La compañía biofarmacéutica GSK reunió a una docena organizaciones de pacientes en su planta de Aranda de Duero (Burgos) para promover el intercambio de experiencias. Las entidades que se dieron cita en la fábrica representan a más de 1.800 asociaciones y 900.000 personas que conviven con distintas patologías.
Entre otros, se dieron cita en la visita personas afectadas por enfermedades crónicas respiratorias, como asma, EPOC o alergia, pacientes renales, hepáticos, con esclerosis múltiple y afectados por lupus y otras enfermedades autoinmunes. También, mujeres afectadas por cáncer ginecológico o personas que han sufrido las consecuencias de la meningitis, según informaron hoy fuentes d ella compañía a través de un comunicado de prensa recogido por Ical.
Los asistentes fueron recibidos por la directora de la planta de GSK en Aranda de Duero, Carolina Sánchez-Céspedes, quien incidió en “la importancia de acercarnos a los pacientes, que son la razón de nuestro trabajo diario, mostrando los procesos y la tecnología que ponemos en marcha cada día en esta fábrica. Nuestro objetivo es mejorar la salud de las personas, conocer, escuchar y ponerle nombre a estas personas nos hace más conscientes del impacto de nuestro trabajo y nos motiva a seguir mejorando cada día”.
Sánchez-Céspedes señaló la apuesta de la compañía por la innovación para mejorar el desarrollo de estos tratamientos y acelerar su fabricación, utilizando tecnologías avanzadas para asegurar que cumplen con los más altos estándares de calidad y garantizar la seguridad y eficacia de todos los productos biofarmacéuticos.
Durante el encuentro, los representantes de las entidades también pudieron conocer de primera mano el compromiso de GSK con la sostenibilidad y el medio ambiente, a cargo de la directora de Seguridad y Medio Ambiente de GSK Aranda, María Casado, quien incidió sobre las iniciativas y prácticas que la compañía implementa en su labor de producción en estas instalaciones para minimizar el impacto ambiental.
Entre otras cosas, los visitantes pudieron conocer el nuevo huerto solar de la planta de producción, formado por más de 6.000 placas solares y que permitirá generar más de 5.700 MWh al año en energía renovable, lo que supone un 30 por ciento del consumo de energía eléctrica actual de la planta arandina y una reducción de casi 1.500 toneladas de emisiones de Co2.
La fábrica de Aranda de Duero, que supera los 650 empleados, produce más de 170 millones de unidades de medicamentos al año, incluyendo varios de los productos actuales más innovadores de GSK, así como aquellos que se irán desarrollando en el futuro. Su actividad, como explicó el director de Calidad y Técnico, Rubén Calvo, se centra en la producción, empaquetado y suministro de productos del área de Respiratorio, Oncología, además de medicamentos para el tratamiento del VIH, entre otros.