Sábado, 16 de Marzo de 2024
Datos que curan
Sin prisa, pero sin pausa, piano, piano, Castilla y León traza su plan estratégico de medicina personalizada con los mimbres bien tejidos. Puede presumir de ser una de las comunidades autónomas con mayor velocidad de implantación, una revolución con múltiples retos y un cambio de paradigma entre la medicina clásica -enfocada en la enfermedad- y la de precisión, que busca afinar hasta diseñar un ‘traje a medida’ para tratar a cada paciente. Y lo hace a partir de enormes cantidades de datos, datos que curan, y donde la inteligencia artificial también se hace hueco para poder procesar e interpretar tal amalgama de información que, debido a su complejidad y volumen, ya no se pueden gestionar de forma tradicional.
Un estudio del Instituto Roche, de los más rigurosos en España, destacó ya hace cinco años que Castilla y León estaba en el grupo de autonomías con mayor desarrollo en la medicina personalizada y de precisión, la tercera. Su metodología se definió como modelo de referencia estatal con potencial de implantación en otros territorios, que ha seguido creciendo. Ahora, la Consejería de Sanidad remata su hoja de ruta que servirá para integrar, dar un marco y potenciar las múltiples iniciativas desarrolladas en la última década y que la han consolidado como referencia para muchos centros y patologías.
No en vano, la medicina personalizada y de precisión se ha considerado como un elemento de posicionamiento de las grandes economías internacionales, en el que España comenzó a trabajar en 2019, después de recoger el guante lanzado en 2015 por el entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama. Hace cinco años, creó la ponencia de estudio sobre Genómica del Senado, que concluyó con 13 recomendaciones, donde Castilla y León partía ya “con una situación privilegiada”.