La Gerencia del Complejo Asistencial Universitario de León desmintió hoy “categóricamente” las informaciones de Izquierda Unida que denunció esta semana la existencia de contratos para la realización de pruebas diagnósticas -principalmente TAC y resonancia magnética- con el grupo Atrys-Health, señalada por una presunta “presión a oncólogos” sobre las terapias prescritas. 

“Los oncólogos del CAULE tienen absoluta libertad para prescribir cualquier tratamiento autorizado en el Sistema Nacional de Salud y que consideren el más adecuado para sus pacientes”, manifestó en un comunicado la dirección del centro hospitalario, que precisó que no se derivan pruebas diagnósticas a este grupo empresarial. 

“Únicamente”, precisó, existe un contrato con una de sus empresas que tiene como objeto la emisión de informes -análisis e interpretación- de imagen diagnóstica no oncológica, lectura de TAC y Resonancia Magnética, cuyo expediente de contratación se resolvió tras pública concurrencia en mayo de 2024.

“Lamentamos que estas informaciones puedan generar desconfianza de los pacientes en sus oncólogos, que utilizan todas las herramientas de diagnóstico y tratamiento que tienen a su disposición para conseguir los mejores resultados posibles”, concluyó la Gerencia.